Carta del general Luis Cabrera a Carlos Ibáñez del Campo

Abstract

Continuando la serie de sus cartas, referentes a la organización política en que es necesario crear en Chile, para garantizar la normalidad absoluta y la tranquilidad en el trabajo, insiste nuevamente en la conveniencia de que S.E. instituya la formación de un partido de Gobierno, sobre la base de los antiguos partidos políticos, que, aunque muy desprestigiados, servirán de base para la formación del nuevo. Dice que lo que ha predicho en sus anteriores comunicaciones se ha cumplido al pie de la letra y manifiesta su pesar por el conato o intento de conspiración por parte de estudiantes y políticos. A pesar de que se ignora cuáles son las proporciones del movimiento y el origen de las medidas adoptadas, manifiesta que tales hechos producen un enorme daño a Chile, pues le arrebatan los restos del tradicional prestigio y afectan sus valores económicos. Lamenta por segunda o tercera vez la generación del actual congreso, a quien acusa nuevamente de llevar encima dos taras, la inherente a su característica de régimen y la relativa a su legitimidad y forma de generación. Dice que todo esto lo expresa sin segunda intención ni guiado por intereses mezquinos, lo hace por querer hacer un bien y porque tiene la seguridad de que existen las fuerzas para crear ese partido de Gobierno cuyos beneficios y ventajas serían enormes.